Ir al contenido principal

LOS CINCO ESCALONES

A.’.L.’.G.’.D.’.G.’.A.’.D.’.U.’.
Trabajo de Buril “LOS CINCO ESCALONES”
Comp.’. Mas.’. de la Resp.’. Log.’.Simb.’. UNIÓN Y FUERZA no. XXI

En el Libro de los Reyes, la construcción del templo, 6,8 dice así: “La entrada que conducía a la cámara del medio estaba situada en el lado derecho del templo y tenía acceso por medio de escaleras de caracol a la cámara del medio, y de ésta comunicaba a la tercera.” grado del compañero masón.

“SCALARI” o peldaños de una escalera, definidos como el paso dado en sentido progresivo o el grado de ascenso hacia un objetivo determinado.

Para el hombre antiguo los escalones eran el puente que lo conducía a las alturas, logrando así un contacto más cercano e íntimo con sus dioses. En las pirámides mayas, las gradas configuraban empinadas y extenuantes escalinatas, que enlazaban la esfera de los mortales con la de los dioses, a quienes rendían tributo y sacrificio en los templos emplazados en sus  cúspides.

En la sociedad moderna, las encontramos amplia y elegantemente desplegadas en las fachadas de los recintos, representando el ascenso como una condición necesaria para alcanzar sus umbrales de entrada. Constituyen también preludio constructivo para el ingreso a universidades y un simbolismo de transición entre la ignorancia y  el saber.

En el grado de compañero se privilegia la educación intelectual o la gnosis, bajo las cuales aparecen los cinco escalones (edad del compañero masón) y se demuestra que se ha dejada atrás la juventud insensata y ha comenzado la etapa de la dignidad del hombre y la difícil tarea de su mejoramiento, como el primer deber que se le presenta y se le conduce a ascender escalón tras escalón hasta alcanzar la cima, en donde le espera el tesoro del conocimiento y la sabiduría.

Los cinco escalones que deberá subir el compañero masón hasta culminar sus estudios en este grado obligan a poseer la inteligencia para comprender, la rectitud para dirigirse conforma a las leyes de lo justo fundadas en la conciencia, el valor para obrar, la prudencia para guiarse y por último la filantropía o amor a la humanidad, a la que debe mostrarse la virtud para detestar al vicio y enseñar la verdad para abominar la mentira.

Los nombres y colores que corresponden al tramo de la escalera de caracol que debe escalar el compañero son:
La inteligencia, color negro, representa la prueba de la tierra.
La rectitud, color blanco, distintivo de la prueba del agua.
El valor, color rojo o púrpura, simboliza a la prueba del fuego.
La prudencia, color azul, relativo a la prueba del aire.
La filantropía, color verde, que es considerado, como incoloro o policromo y que pertenece a la quinta esencia que se presenta especialmente al compañero, correspondiendo al principio universal, en el que se originan y resuelven los cuatro primeros elementos.

Dichos escalones, pudieran tener alguna relación con los mudras (armonía, sabiduría, energía vital, vacío, amor), no atribuidas a una religión en particular, y, en su esencia una comunión con la conciencia espiritual y cósmica.
El primer escalón se llama “TESDAKA”, (Justitia, élemosina). Es un deber emplear todos los medios físicos, morales e Intelectuales para salvar a los desheredados y desgraciados, poniendo en juego cada uno de los cinco sentidos, para encontrar la verdad y aplicar los principios de la justicia dentro de nuestras acciones. La inteligencia, debe a la razón el hecho de ser provechosa y es la facultad que nos evita caer en la apatía y la holganza, dominados por las preocupaciones, las pasiones y los malos hábitos y es el factor distintivo del hombre en relación con los demás seres creados por la naturaleza. La inteligencia como la capacidad de la especie humana para que de la mano de la empiria o el racionalismo podamos descifrar nuestros entornos, llevándonos a considerar el pasado, presente y futuro, estableciendo patrones, códigos, moldeando escenarios y anticipándonos como estrategas. Hablar no solo de una inteligencia cognitiva, sino, a raíz de los últimos años, inteligencia emocional (grado de aprendiz), donde se adiestra nuestra capacidad de integrarnos en armonía en nuestra sociedad, podemos decir entonces  que la inteligencia es una poderosa herramienta para la conquista de su propio y complejo universo de nuestro interior en el empleo de otro rasgo de character, la voluntad. El color negro de este escalón, simboliza al misterio de las tinieblas, al dolor moral, a la pesadumbre, a la tristeza, al mal, a lo desconocido, a la noche.

El segundo escalón se denomina “SCHOR SAHAU”, (Bos Albus). Su interpretación se refiere; a lo que no quieras para ti, no lo desees para nadie, es decir, no hagas a otro, lo que no quieras que hagan contigo. La verdad es nuestro patrimonio universal, por esa razón debemos propagarla con rectitud y equidad, luchando por comprenderla y demostrarla para estar en condiciones de utilizarla en provecho de nuestros semejantes. Rectitud, simbolizada por la Regla, esta viene a iluminar y orientar a la razón, obscurecida por los instintos y la forma tan relativa que el profano concibe sus entornos y realidades, jamás deberemos de poner en acción la Voluntad sin el timón de la Rectitud, es menester hacer acopio de esfuerzos, obrando siempre con rectitud para llegar a entender lo que es la razón y la justicia como símbolo de la libertad. El color blanco que ostenta este escalón es emblema de la pureza, la inocencia, la verdad, la nobleza, la alegría, la ciencia, la luz, el día, etc.

El tercer escalón llamado “MATHOH”, (Dulciis). Se deben soportar los golpes de la adversidad con resignación, conformándose con su suerte, cuando el destino de para una vida azarosa o llena de escollos. El valor para realizar nuestros propósitos aun a costa de nuestro propio sacrificio; es una facultad de que nos dotó la naturaleza, para luchar denodadamente contra el error, la barbarie, la mentira y el oscurantismo. No debemos olvidar que los buenos operarios, los obreros inteligentes y animosos, han salvado al mundo por su energía y su constancia y que nosotros descendientes de ellos los reemplazamos en su tarea, manteniendo firmes los principios de libertad, igualdad y fraternidad, Este escalón es de color rojo o púrpura y representa al valor, al arrojo, a la fuerza, al fuego, al calor, el Valor estéril y vano resultaría el trabajo en logia del compañero masón si éste no tuviese efecto en el mundo profano en su búsqueda de la verdad en el afán de construir una sociedad más justa, más pluralista y más fraterna no está exenta de riesgos y peligros, asi pues, el valor no se hereda ni tampoco se adquiere por el arbitrio de la razón, se construye día a día, palmo a palmo, en la dimensión de lo cotidiano, a fuerza de postergar el interés propio por el del bien ajeno, donde, la voluntad es la fuerza vital que lo proyecta en el mundo de lo concreto.

El cuarto escalón recibe el nombre de “EMOUNAH”, (Fides y firmitas). Indica que debemos ser francos y huir del engaño o la mentira, procurando aplicar siempre nuestros conceptos y sinceros razonamientos para decir la verdad, evitando perjudicar a terceros. La prudencia en la facultad que nos permite obrar bien y atinadamente durante los trances difíciles, comprometidos o peligrosos para salvarnos del fracaso, combatiendo incesantemente a la hipocresía que explota las miserias humanas, esclaviza las conciencias y destruye el bien armónico, a través de mantener estrechos los lazos de la unión y el engrandecimiento de los pueblos, el color de este escalón es el azul y representa al infinito, a la unión colectiva, a la fidelidad, a la constancia, a la confraternidad universal, a la masonería simbólica. La Prudencia si bien se asienta en la Inteligencia, igualmente se sirve de ella, cada vez que saca lección de sus errores. Como los pasos hacia el lado que quiebran la marcha del grado, su éxodo hacia las luces del oriente no sigue siempre una misma dirección y se  vale  de  los desvíos del camino, señal de que la verdad no es única y que puede estar en cualquier parte. El quiebre en la marcha del compañero lo aterriza a la condición falible del hombre y a la necesidad de la introspección y  el  auto examen para  poder recuperar el rumbo perdido. Su propia en inherente vulnerabilidad no ha de quebrar su moral sino recordarle su también permanente condición de aprendiz,    no obstante ahora provisto de nuevas y más poderosas  herramientas.


El quinto escalón designado como “GAMAL SAGGHI”, (Labor magnus). Significa que se debe trabajar constantemente para alcanzar la perfección.
La filantropía es una de las perfecciones humanas, que se alcanzan por medio de la abnegación y nos permite ver a todos los hombres como verdaderos hermanos. Consiste en practicar el sentimiento del amor a la humanidad, y tolerándola y ayudándola durante las vicisitudes que se le presenten y conduciéndola por el camino más seguro de la existencia, respetando para el efecto las opiniones sinceras de nuestros hermanos. El color que aparece para este escalón es el verde, emblemático de la naturaleza, la realidad, la esperanza, la inmortalidad, la victoria, el nacimiento. Como puede observarse la escalera de caracol es la senda que debe recorrerse en el segundo grado para llegar hasta la meta de los estudios del compañero masón y que representa la ardua labor que protestó desarrollar y cumplir en beneficio de sus semejantes.

En nuestros trabajos, estudios y horas de meditación, debemos recordar que el perfecto compañero, es el amigo inseparable del aprendiz y el auxiliar leal y sincero del maestro.

Durante nuestro caminar a Or.’. como Ap.’. de Mas.’. la oscilación entre el péndulo de luz y oscuridad, nos decidimos transitar hacia lo inhóspito, desconocido quizá del umbral de la fraternidad de nuestros congéneres, una enseñanza que en el hombre dicta el conducir de nuestras acciones encaminadas hacia el bien individual, común y colectivo; este camino de Ap.’. de Mas.’. nos llevó a entender nuestra esencia y relación en nuestro entorno, apreciando el trabajo bajo una instrucción de hacer el bien, moldeando realidades, ahora bien, ser Comp.’. Mas.’. nos “faculta” como: la Capacidad o aptitud natural, física o moral que tienen las personas para realizar una cosa, que estriba desde nuestro conocimiento interior “subir”, “bajar” por la escalinata de estos cinco escalones empleando nuestro posicionamiento racional, en la búsqueda de luces, en pro de la verdad y en argumentos que den valor a nuestras palabras, nuestros actos, hechos que trasciendan en la anchura del tiempo y que finalmente, este amor por los hombres, se exprese no solo en una palabra, actos, sino ejemplos que arrastren las conciencias del mundo profano a coadyuvar a nuestro V.’.M.’. en la tarea que mejor definirá a un Comp.’. Mas.’. que nuestro corazón será del polvo, arrancado de nuestro ser, antes de ofender nuestra fraternidad.











COMP.’. MAS.’.

EVERARDO CERECERO MARTINEZ

Comentarios

  1. Me agrada el comentario y nos ilustra bien sobre el aprendizaje del Mason en su tarea de llegar a la perfección de su grado. Fraternalmente César Retamal

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

EL MANDIL DEL COMPAÑERO, UNA DESCRIPCIÓN GENERAL

A.’.L.’.G.’.D.’.G.’.A.’.D.’.U.’. Trabajo de Buril “EL MANDIL DEL COMPAÑERO DESCRIPCIÓN GENERAL” Comp.’. Mas.’. de la Resp.’. Log.’.Simb.’. UNIÓN Y FUERZA no. XXI La palabra MANDIL viene de la voz latina “MANTILE”, la que también se traduce como sinónimo de “MANDIL-LANDIN”, en el primer caso y en términos profanos, se refiere a un trozo de tela impermeable que se sujeta al cuerpo a la altura de la cintura por medio de una Cuerda o Cinta, afecta diferentes formas y tamaños y sirve para proteger las ropas del individuo que lo usa durante los trabajos rudos; también se refiere al nombre que recibe el trozo de cuero que usan los Soldados de la Banda de Guerra, con el fin de preservar la antepierna del pantalón, de las rozaduras que producen los arillos de los tambores; y en el segundo caso se trata de un pedazo de bayeta que se pone sobre el lomo de los caballos y bajo la silla de montar; pero también en el primer caso, recibe los nombres de DELANTAL y de PECHERA, el delantal es

EL MALLETE

El mallete, que es como un martillo de madera, representa en la Masonería a la autoridad, por eso es utilizado por el Venerable Maestro, que es el Presidente de la Logia y, por consiguiente, preside los trabajos masónicos, y también por los Primero y Segundo Vigilantes, que son los Primero y Segundo Vicepresidentes de la Logia, respectivamente. Solamente esas tres Luces del Taller hacen uso del mallete. El mallete “es el símbolo de la voluntad activa, de la energía puesta al servicio de la inteligencia esclarecida por el corazón”. Es de esa manera que el mallete debe ser manejado, principalmente por el Venerable Maestro: con solidez y seguridad, pero con moderación, sin estruendos, para así demostrar equilibrio, serenidad y responsabilidad. Por el sonido de los malletes se puede evaluar el grado de compromiso con la Orden de aquellos que lo manejan. No está de más recordar que la autoridad de una Logia es ejercida por el Venerable Maestro y por los Vigilantes, pues como está prescrito