Luego de ser elegido Venerable Maestro, debe ser “instalado”, es decir, pasar por ceremonial para que, en un segundo acto, jure y ocupe su lugar con el ejercicio de todas sus prerrogativas.
El ceremonial es moderna, fue introducida en la masonería inglesa en el año 1810 y posteriormente adoptado por toda la masonería mundial.
El ceremonial se desarrolla mediante un ritual específico y a la ceremonia solo asisten otros maestros instalados, ya sea de la propia Logia o de otros.
Evidentemente, estos maestros instalados ya han pasado por la “veneratura”.
También hay un ritual para instalar un Gran Maestro, y solo los ex-Grandes Maestros pueden participar en la ceremonia.
El ritual de instalación se preserva de la curiosidad profana y cada Logia lo guarda en secreto.
No hay literatura al respecto.
El Gran Maestro nombra al instalador, que lo representa; sin embargo, el propio Gran MaestrO puede ser el instalador.
El ritual se parece al del rito de York.
El cargo de Venerable Maestro puede ser impugnado, por elección, por cualquier Maestro.
A lo largo de los años, cada Logia forma su cuerpo de maestros instalados, que también tienen la función de guiar.
Cada masón debe aspirar, algún día, a ejercer la “veneración” de su Logia.
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